Sínodo 2010: lo más sobresaliente de la ponencia del pastor Carlos Duarte

En la mañana del viernes 08 de octubre, el pastor Carlos Duarte hizo una ponencia sobre lo que considera los puntos más importantes a tener en cuenta en la tarea de la misión urbana.
El análisis será desarrollado alrededor de siete ejes sobre la realidad social y comunitaria, que necesariamente se deberá tener en cuenta en la reflexión sobre la misión de la Iglesia.
Revolución edilicia: hay una realidad a través de la cual la construcción ha alcanzado una importancia fundamental en lo que hace al desarrollo económico y demográfico. En las ciudades lo más común son las propiedades verticales en grandes edificios. Esto configura un modo de relación muy puntual y casi siempre superficial.
Tecnología y comunicaciones: Vivimos la época de los grandes avances tecnológicos a través del cual se está desplazando a las personas y reemplazándolas por máquinas. La industria elimina la mano de obra humana por equipos tecnológicos y las oficinas reemplazan a las personas por computadoras.
Expectativa de consumo: Es el nuevo proceso que se está viviendo y que tiende tremendamente a soluciones individuales. Esto atenta contra la misión de la iglesia.
Zonificación de la pobreza y la riqueza: La IERP eligió hacer misión. Pongamos un ejemplo: en caso de que una comunidad decida poner un merendero para los necesitados. En ese caso, el 60 % de los miembros no se va a enterar del trabajo, el 30 % lo va a rechazar y solo un 10 % de los miembros se va a comprometer. De ese 10 %, la mitad va a proponer que bajo ningún aspecto se tiene que hablar de la fe o de Dios y la otra mitad va a querer “sacar” buenos cristianos en un mes.
Violencia y bienestar: Esta se manifiesta cada vez más en los diferentes aspectos y cada vez más descarnadamente en lo que tiene que ver con el medio ambiente, la sociedad, lo social, lo político, etc. Aquí hay una paradoja interesante, porque las ciudades son el espacio en los cuales la violencia se reproduce cada día más y va siempre en aumento y por otro lado la gente se va a las ciudades en búsqueda de mayor bienestar, servicios, educación, salud, eventos culturales y sobre todo la posibilidad de consumir.
Diversificación religiosa: Hoy podemos participar en diferentes propuestas religiosas con facilidad. Nuestra gente participa y más de una vez, después hacen una comparación respecto de nuestra iglesia y resaltan nuestros aspectos negativos, sobreponiendo a ellos los muchos aspectos positivos de los demás. ¿No será que Dios no nos estará llamando a morir a lo viejo y nacer a lo nuevo?.
El tiempo se acorta: Esta realidad ha golpeado a nuestra iglesia. Las tareas son muchas y todos tenemos poco tiempo. Lo extracurricular ocupa el tiempo de nuestros jóvenes. Los adultos no paran un solo minuto, van de un lado para el otro, cumpliendo con sus obligaciones y la sensación que siempre queda es que hay cuestiones pendientes todo el tiempo. Al respecto, hay una publicidad de un lavavajillas que dice que si la mujer se compra un determinado aparato, se ahorra 300 horas por año. Lo que no dice es que esa mujer necesitará trabajar 400 horas más por año para pagar las cuotas y los intereses que el vendedor le cobra.
En definitiva, el resultado es que tenemos poco tiempo para la iglesia. ¿Será posible que Dios no nos estará pidiendo que midamos nuestros tiempos de otro modo?
Por otro lado invitó a pensar en un par de ejes que tiene que ver con lo personal y el involucramiento en el trabajo de la misión
Llamado y vocación: hay una idea de que necesitamos una receta a través de la cual resolver nuestro problema, es decir tener más gente. ¿No será un simple instinto de preservación?. Desde los procesos que vamos viviendo como comunidades ¿Cuáles son las cosas que nos desafían a ir al encuentro de los demás?
El achicamiento de la iglesia es una bendición, porque tenemos dolores y eso nos hace preguntar para qué estamos acá.
El compromiso de hacer misiòn: El el último sínodo se eligieron las personas de parte de los distritos para que trabajen la misión en la CREE, pero si no asumimos todos el trabajo no va a pasar nada. Creo que es la hora del coraje, de aceptar al nuevo, al diferente. Es verdad que la incoporación del nuevo trae problemas, nos llenan de cuestionamiento. Quizás el nuevo que se incorpore, a través de sus preguntas, traigan nuevas respuestas porque nos van a obligar a reforzar lo que nosotros entendemos por fe.
Tenemos que aprender a querer a nuestra iglesia. No podemos hacer misión desde un mensaje negativo. Tenemos que dar un mensaje optimista de la misión.
Costoeconómico de la misión: Por un lado ¿Cómo gastamos el dinero? Lo otroes ver como aprovechamos los recursos y los edificios: un templo que se abre una vez al mes, no funciona. Lo otro es el dinero que damos todos los meses a la iglesia tiene que ver con la importancia que le damos a la iglesia. Pagamos el cable, el alarma.... pero si la iglesia nos pide el mismo monto, con seguridad voy a renunciar a la membresía. Hay que resignificar la importancia de nuestra iglesia.
De todos modos la misión deber ser financiada y pocas veces da un resultado inmediato. Por eso necesitamos un compromiso de parte de todos en esa significación nueva a nuestra IERP.
Para finalizar dijo estar seguro que como iglesia tenemos un gran potencial y que esto lo debemos poner al servicio.
Sínodo 2010: lo más sobresaliente de la ponencia del pastor Carlos Duarte
Reviewed by Proyecto Buscando Ser Tierra Fértil
on
16:26:00
Rating:

No hay comentarios