"¿Cuántos panes tienes?"

La pregunta que Jesús les hizo a sus discípulos nos la repite a nosotros aún hoy: ¿Cuántos panes tenemos?. Esto es, qué cosas somos capaces de compartir y cuán dispuesto estamos a vivir en comunidad a partir de nuestros dones (materiales y espirituales) y nuestras experiencias.
Ese ha sido el lema que nos ha acompañado a celebrar, acompañados por las mujeres de Chile,

quienes nos presentaron la liturgia que hemos celebrado en las diferentes comunidades.
En lo que hace a nuestro proyecto, hemos compartido un espacio ecuménico con la IELU (Iglesia Evangélica Luterana Unida), tanto en Posadas como en Obera, mientras que en Leandro N. Alem celebramos en nuestro templo, pero siempre con el mismo espíritu, pensando nuestros dones y las cosas que Dios ya nos a dado, para que los pongamos a su servicio, sirviendo a los demás.

Algunos tienen muchos panes, pero no les interesa compartirlos con los que no tienen.
Algunos tienen muchos panes, pero no han encontrado la manera de compartirlos con los que no tienen.
Algunos no tienen más pan que las costras viejas que alguien tiró a la basura.
Y muchos apenas tienen pan y aún así lo comparten.